El cobre brilla comenzando el 3er trimestre, impulsado por un sesgo de política monetaria más laxo y temores arancelarios.
- MESADINERO SpA
- hace 4 días
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El cobre sube hoy a los US$5,21 por libra, impulsado esta semana por datos de PMI de manufactura que superaron las expectativas del mercado, tanto en China como en EE.UU. durante junio (50,4 y 49, respectivamente). A esto se suma un sesgo de política monetaria más laxo que el observado en mayo-junio: la probabilidad de un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal (FED) de -25 puntos base en septiembre sube hoy a 72,3%. Con estos vientos de cola, el cobre acumula un retorno de +10,45% desde junio y un +29% en lo que va de 2025.

Desde el denominado “Liberation Day”, impulsado por D. Trump en abril de este año, las cadenas de abastecimiento del cobre se han visto afectadas. Los temores sobre un alza en los aranceles han modificado las dinámicas del comercio global de cobre, llevando a los traders de metal físico a retirar el cobre de la Bolsa de Metales de Londres (LME) y trasladarlo al Comex de la CME en Nueva York (CMX).
En este contexto, el spread entre ambos contratos ronda actualmente los US$1.200 por tonelada, mientras que los inventarios del Comex se han incrementado hasta alcanzar las 187.053 toneladas métricas. Por el contrario, los inventarios de la LME muestran un nivel considerablemente menor, de solo 93.675 toneladas métricas. Cabe destacar que, históricamente, los inventarios de la LME han tendido a ser superiores a los del CMX, y que, al menos con la información disponible, esta divergencia no se había observado en los últimos 30 años.

Por otro lado, en términos del total de inventarios de cobre —sumando los de la LME, el Comex y la Bolsa de Metales de Shanghái— se observa una disminución significativa: desde 619.880 toneladas métricas al cierre de la última semana de febrero, hasta 362.279 toneladas métricas en la última semana de junio (-41.55%). Esta tendencia sigue evidenciando una fuerte demanda por el metal durante este año.
Cabe mencionar, eso sí, que nuestras proyecciones macroeconómicas para la economía estadounidense indican que durante julio el crecimiento tenderá a desacelerarse, acompañado de una moderación en la inflación. Sin embargo, para el resto del trimestre proyectamos que la inflación podría promediar un nivel algo más alto, lo que podría limitar los recortes de tasas que la Reserva Federal pueda realizar más adelante.